La moralidad, la ética y la compasión son rasgos humanos
importantes y, aunque la culpa también puede ser valiosa, no deberÃa ser el
factor que lo motive a ser una buena persona. Hay un millón de razones
para ser una buena persona, y “compensar una mala acción” es la menos
altruista. Asà es como la culpa impacta negativamente en su vida.
1. La
culpa te afecta fÃsicamente
El
sentimiento de culpa puede agobiarlo, es una puerta al arrepentimiento. Cuando
no se abordan adecuadamente, ambas emociones comienzan a agobiarlo con el
tiempo. Si no confronta inmediatamente su culpa, se acumula y puede
enfermarlo fÃsicamente. No solo eso, impacta negativamente en sus
decisiones de vida. Comerá menos saludablemente, incluso podrÃa
desarrollar desordenes
alimenticios, hará menos ejercicio y se deteriorará lentamente con el
tiempo.
No
es solo salud fÃsica; la culpa afecta su lenguaje corporal fÃsico,
incluyendo su caminar, postura y expresiones faciales, incluso puede distraerlo
de una higiene adecuada.
2. La
culpa impide el éxito
En
la vida diaria, ya es bastante difÃcil conseguir un trabajo o un ascenso. A
la dificultad se suma el hecho de que ha estado perdiendo el tiempo pensando en
todas las cosas "malas" que ha hecho, en lugar de mantenerse al dÃa
con la información más reciente en su campo de trabajo. ¿Puede pensar en
una corporación o persona exitosa que nunca tomó una decisión que lastimó a
alguien?
Si puedes, estás equivocado. Herir a alguien puede no ser
la intención, pero cuantas más personas afecten tus decisiones, más imposible
será tomar una medida que no lastime a nadie. No es posible que el
presidente de cualquier paÃs, tome una decisión que ayude a todos sin afectar
negativamente a nadie.
3. La
culpa cambia tu personalidad
Cuando
estás envuelto en la culpa, puedes sentir que eres la misma persona, pero la
gente te percibe de manera diferente. Con el tiempo, te endureces y
algunas personas te dirán que esto se llama madurar y crecer, pero no tiene por
qué ser asÃ.
Es
una falacia que no puedas mantener el mismo nivel de curiosidad, placer y
emoción que tenÃas cuando eras niño, durante toda tu vida. No tienes que
ser agrio, demasiado cuidadoso y crÃtico para ser un adulto. Deja la
culpa.
4. La
culpa te hace castigarte
En
la naturaleza, la fuerza bruta, la velocidad y otros atributos fÃsicos
determinan su supervivencia. La sociedad humana es diferente en que la
inteligencia y la invención pueden superar los desajustes fÃsicos. A
medida que evolucionamos, creamos sociedades organizadas en base a conductas
éticas y moralese, como una forma de protegernos.
Con
el tiempo, la sociedad evolucionó, pero la esencia no ha cambiado. Somos
entrenados por muchos maestros y practicantes religiosos para castigarnos a
nosotros mismos por cruzar las lÃneas morales. Sin embargo, muchas de esas
normas morales son creadas solo para mantener las creencias de algunos
sectores, pero nada tienen que ver con “el bien y el mal”.
5. La
culpa arruina tu vida
Todos
cometemos errores; a pesar de nuestras mejores intenciones, nadie pasa por la
vida sin dañar a alguien. No estoy diciendo que debas dañar intencionalmente
a las personas, pero debes aceptar que tus acciones podrÃan dañar a las
personas que te rodean. No puedes complacer a todo el mundo, todo el
tiempo, pero el estar demasiado preocupado por los impactos negativos de nuestras
acciones, nos hará perder muchas oportunidades.
En
lugar de sentarse al margen jugando a lo seguro, debemos aprender a concentrarnos
en el impacto positivo de nuestras acciones. Cuando te concentras en el
bien mayor, te sentirás mucho más realizado.
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